Una historia de Eri Nares
¿Qué es eso que te une con alguien más? ¿Sus emociones, sus miedos, su forma de ser? Quizá todo…o quizá no sabes definirlo. ¿Y sabes por qué? Porque las emociones y sentimientos son tan cambiantes como un disco, como cada acorde y melodía creada que puede producir alegría y felicidad en un mismo día.
Un colegio en aquella tarde era el sitio perfecto para comenzar a crear la historia que se convertiría una de las canciones favoritas de la banda. La adrenalina por salir al escenario, el nerviosismo por saber qué sucedería y hambre por conquistar a su público era todo lo que pasaba por la mente de los cuatro integrantes.
Poco a poco los estudiantes se iban acercando; algunos no sabían a qué iban, otros más estaban dispuestos a sacar su estrés entre canción y canción y todos coincidían en algo: encontrar ese clic.
Las guitarras comenzaron a sonar, el juego entre público y banda iniciaba. Los músicos necesitaban encontrar el punto exacto donde fueran uno mismo con sus oyentes, esa parte donde la música fluye creando un placer auditivo indescriptible, que sólo se vive en el momento y que es difícil definir.
Entre risas e incertidumbre transitaban las canciones. Las canciones de su primer EP, Juventud Sónica, abrían camino en búsqueda del sonido indicado, preciso, único.
En medio del tumulto de gente se escuchaban risas y voces que distaban de toda sinergia entre músico y espectador. ¿Será éste el peor miedo del artista? ¿Sentirse ignorado o rechazado es lo peor que te puede pasar previo a la presentación oficial de tu primer LP?
Pepe y compañía no querían averiguarlo. Por el micrófono se escuchaban palabras que alentaban a su público a integrarse, a presenciar ese momento que con días anticipados de ensayos habían preparado. El momento tenía que ser único e irrepetible, no podían permitirse que se les saliera de las manos.
El sonido de la guitarra en los primeros cuatro cuartos comenzó y fui ahí cuando la banda supo que algo interesante se acercaba.
-¿Cuánta pena tienes que aguantar? Nadie dice nunca la verdad. Es lo que nos une mucho más- la pregunta y respuesta que hizo movilizar el lugar. El círculo se formó, los estudiantes dejaban a su cuerpo expresarse libremente con cada nota, cada rasgueo, cada redoble de batería; era su momento, sólo de ellos, de aquel cuarteto con su público y ellos lo sabían.
El concierto terminó entre aplausos y buenos deseos a la agrupación. Se había logrado el cometido, se había disfrutado del momento y se había formado una historia…su historia…que en unos años cobrará aún más sentido.
En el recuerdo de Pepe está muy marcado ese momento. En una entrevista para “La Rata Chile”, portal enfocado en música chilena e internacional, comentó lo siguiente:
“Los estudiantes empezaron a hacer un círculo y correr como si fuera un concierto de metal. Me gusta la reacción de la gente al final del tema cuando se vuelve un poco más lento, hay como una explosión. Es un momento inesperado de una canción que va aumentando su intensidad hasta llegar a una parte súper lenta. Muy inesperada.”
Hoy Artificiales se encuentra promocionando su LP, Fin de Semana, donde en poco más de 32 minutos nos regala un viaje de emociones, introspección y frescura. Hoy está agrupación nacida en Maipú, al sur de Santiago de Chile, puede presumir con orgullo que valió la pena trabajar por más de 2 años para encontrar ese noise pop que los llevará a grandes venues locales y, en un futuro, a armar su gira internacional.
Tags: Artificiales, historia, escuela, rock, LP, EP, Juventud Sónica, Chile, , nota de Staff Rocksonico, noticias internacionales
CorporativoContacto Anúnciate con Nosotros Términos y Condiciones Quiénes somos Aviso de Privacidad Banners de Rocksonico en tu sitio SOLCOR AUDIO - Cables para instrumentos musicales 100% mexicanos! |
Información
para Medios © RockSonico.com 2024 La Comunidad del Rock - ROCK SONICO, A.C. |
REDES SOCIALES |