Café Tacvba
Foro sol
Por: Angel Sánchez
El sábado pasado más de 50 mil personas formaron parte de un capítulo para la historia no sólo del rock mexicano, sino de un país impulsado por millones de jóvenes, cuando la mejor banda de rock de Latinoamérica festejara 20 años de vida en un Foro Sol tapizado de flores – el acto revolucionario sin manos que marcara la primera década del siglo XXI.
Los chicos de Satélite, después de logros como el de la noche del 13 de junio, son ya todo un hito en la historia contemporánea del país, motivo no sólo de orgullo, también de ejemplo para generaciones de mexicanos al mostrar que la creatividad, el dejar de lado el qué dirán, la convicción de creer en uno mismo y en un proyecto, el trabajo en equipo, la perseverancia, honestidad, humildad, el ser consciente de su pasado y raíces y no renegar de ellas sino mostrarlas con orgullo al ser razón de inspiración, tomar la cultura como algo que nutre el alma, el cambio como única constante en la vida, el disfrute por lo que uno hace y vive, son factores que en conjunto son sinónimo de éxito.
Que en México la gente puede ponerse de acuerdo para el desacuerdo, que las cosas pueden ir más allá de una sociedad mediocre, consumista, dividida, llena de estereotipos, de cosas prefabricadas, amordazada por el miedo y donde once enanos dentro de una caja ponen a todos de cabeza pero a nadie despierta.
Eran las ocho de la noche y el Foro Sol aún no registraba el lleno, pero la gente de la sección A calentaba con unos globos multicolores que habían sido lanzados desde el escenario. Contaba con siete pantallas gigantes, ordenadas como naipes formando un triángulo. A los costados unas cortinas rojas que enmarcaban una batería, guitarras, jaranas, bajo, sintetizadores y una estructura espiral al costado izquierdo del escenario. No podían faltar dos pantallas a los lados en las cuales se proyectaba sin éxito el previo oficial de “Café Tacvba la película”, la cual será lanzada en 2010.
En punto de las 830, Tenochtitlán fue sacudida por un terremoto cuando los primeros acordes de “9” se desataron, dando introducción a los tacvbos que hicieron latir cuatro tambores gigantes anunciando la llegada de la Chilanga Banda. Aquello era el ritual urbano perfecto para comenzar la mejor fiesta de cumpleaños que duró más o menos tres horas y treinta minutos. Mientras con un sonido y espectáculo de luces impecable, en las pantallas aparecían recuerdos de color sepia: carteles del primer aniversario del Lucc, una tocada alternada con el Patrick Miller, estampas a la Siqueiros, fotos de la infancia, tocadas, todos ellos instantes memorables.
Y en las tocadas la neta es el eslam
Pero en mi casa si le meto al reggaeton
Me gusta el jevimetal, me gusta el jarcor.
Me gusta Patric Miler y también me gusta el gronch.
Me gusta la Maldita me gusta la Lupita
Y escucho a los Moderato cuando esta mi noviecita…
La selva de concreto se cimbró cuando Meme, Rubén, Joselo y Quique Rangel - todos enfundados en color negro- ponían a decenas de miles de almas a armar el eslam con la siguiente rola en turno “El borrego”. Las revoluciones subieron cuando el “Pinche Juan” irrumpió el escenario lleno de euforia, y con la mata de chinos a todo lo que daba, le grito al mundo “No controles”. “Alármala de Tos”, hizo acto de presencia para calmar el cuerpo de los presentes pero no sus voces, que corearon con enjundia la rola tributo a otros genios Botellita de Jerez.
“Labios Jaguar”, precedió al silencio necesario para que los tacvbos coreados por la multitud en un clásico ¡Ole Ole! se presentaran con la banda ”¡Hey muchachos, muchachos! ¡Buenas noches! ¿Cómo se la están pasando? ¡Qué chingón verlos echando desmadre! ¡Muchas gracias! Esta es la celebración de todos los que estamos aquí. Vamos a celebrar como todos los días, como todas las noches la vida, pero hoy nos encontramos aquí 50 mil almas, así que. . . ¡Que chingón momento para saber que el ego se desaparezca, que el tiempo también se disuelva! ¡El mejor acto revolucionario pacifista en estos momentos es echar desmadre muchachos! Así que para qué les digo más ¡Llegó el Café Tacvba para que todo el mundo le meta al taconazo!
Es una nostalgia, una decadencia
algo divertido, pero es un gran miedo a la soledad. . .
Las energías de nuevo se desbordaron con la “Rarotonga” trepada a las pantallas en un fondo verde limón. Después al comienzo de la velada “La zonaja”, “Suicidio” y “Que pasará”, eran motivo de baile para Quique y Meme, quienes alternaban sus instrumentos de arriba abajo una y otra vez. Entre aplausos, fanaticada y músicos convergían en el ombligo de la Luna, donde los cuatro “Puntos cardinales” convergen.
Miradas en silencio, y quien lo iba pensar
que después de este primer baile me iba a enamora…
El viento sobre nuestras caras marcaba el destino de nuestra “Bicicleta”, que anunciaba el final de la pista, mientras la voz de Rubén a capela cubría algunos rostros con lágrimas; pero lo mejor apenas estaba por venir. Entonces sobre las pantallas se proyectaba la silueta de Meme tocando su teclado Roland, al interpretar un intro espacial –que recordaba la película Encuentros cercanos del tercer tipo- para enmarcar uno de los momentos más memorables de la historia de este cuarteto mexicano “El baile y el salón”. Una rola que era adornada en las pantallas por una pista de baile muy ochentera, y que en su momento cúspide fue acompañada por la imagen de una esfera de espejos inmensa.
¡Muchas gracias!. . . ¡Ha sido un buen camino, muchachos! Lleno de amigos y de maestros… Na’ más que yo soy bien piedra para aprender, pero bueno ahí vamos. . . Y en ese camino nos hemos encontrado con un buen de compañeros músicos… Para todos ellos nuestros corazones y nuestros recuerdos y bueno pues así como ellos nos encontramos a lo
Tags: , nota de Staff Rocksonico, noticias internacionales
CorporativoContacto Anúnciate con Nosotros Términos y Condiciones Quiénes somos Aviso de Privacidad Banners de Rocksonico en tu sitio SOLCOR AUDIO - Cables para instrumentos musicales 100% mexicanos! |
Información
para Medios © RockSonico.com 2024 La Comunidad del Rock - ROCK SONICO, A.C. |
REDES SOCIALES |